Si, lamentablemente, derramas cualquier líquido sobre tu ordenador MacBook, lo primero que debes hacer es apagarlo a la fuerza, oprimiendo el botón de encendido hasta que el ordenador se apague. Acto seguido, debes llevarlo inmediatamente a un servicio técnico confiable. La electrónica de los MacBooks es tremendamente complicada y frágil.
Olvida los tutoriales de YouTube, no debes manipular el equipo. No lo seques, no lo abras, no intentes aplicarle calor. Sencillamente llévalo de inmediato a un taller informático que maneje bien los productos Apple. Los daños que puede causar el líquido en placa base y procesador pueden ser muy graves si no se reparan a tiempo.
Las pistas de la circuitería del ordenador pueden corroerse en cuestión de horas, además, si el líquido ha llegado al procesador y lo enciendes, puede crear un corto irreparable.